La flacidez, las arrugas, el envejecimiento, son el resultado de desajustes energéticos y de falta de regeneración. Todo esto es acelerado por la alimentación, por los tóxicos, por el estado de nuestro psiquismo, por pequeñas alteraciones hormonales y metabólicas que conlleva nuestro actual estilo de vida.
A nivel general, la acupuntura puede ayudar a restablecer el equilibrio necesario para frenar y revertir los cambios producidos y promover la regeneración. Y a nivel local actúa directamente sobre la calidad de la piel, la flacidez y las arrugas.
DISCLAIMER:
Como todo tratamiento médico los resultados obtenidos dependerán de múltiples factores: estado previo, genética, tolerancia, número de sesiones, etc.